Wilmer Martínez Vásquez, soldado colombiano combatiendo en Ucrania de 28 años, perdió la vida el pasado 19 de febrero en medio de un bombardeo con misiles. Martínez, quien se encontraba en ese país desde abril del año pasado, había decidido unirse a la Legión Internacional de Defensa en apoyo a las fuerzas ucranianas.
La familia de Wilmer recibió la impactante noticia de su fallecimiento en Kurajovo a través de relatos de compañeros de batallón, ya que hasta el momento no han recibido ninguna comunicación oficial por parte del Ejército ucraniano. Según el testimonio proporcionado por Marvin, hermano del fallecido, cuatro soldados, todos colombianos, fueron bombardeados mientras descansaban. La identificación de Wilmer se realizó a través de unas cadenas de plata que siempre llevaba consigo, encontradas sobre su casi incinerado cadáver.
La familia de Martínez Vásquez, se enfrenta a la difícil tarea de repatriar el cuerpo y brindarle sepultura. Sin embargo, han encontrado obstáculos en el proceso, ya que, según relatan, las autoridades colombianas no han proporcionado respuestas claras sobre los pasos a seguir para traer de vuelta a su ser querido.
«Mi mamá está en Bogotá, fue a la cancillería y allá se lavaron las manos y no nos han dado una respuesta que nos dé luces sobre lo que debemos hacer para traer lo que quedó de mi hermano; estamos pidiendo que nos ayuden a traer siquiera las cenizas, o lo que quedó de él para que le podamos dar cristiana sepultura», expresó Marvin.
Kurajovo, la localidad donde perdieron la vida los soldados, ha experimentado un aumento de la violencia en los últimos días, convirtiéndose en el epicentro de los ataques después de la retirada ucraniana de Avdivka y su consecuente conquista por el Ejército ruso.