La definición del salario mínimo para 2026 sigue en suspenso. Tras el fracaso de la mesa de concertación entre empresarios y centrales obreras, la decisión quedará en manos del presidente Gustavo Petro, quien tiene plazo legal hasta el 30 de diciembre para fijar el incremento mediante decreto.
Aunque el Gobierno no ha revelado aún la cifra final, el mandatario anticipó que el aumento incorporará por primera vez en Colombia el concepto de salario mínimo vital y móvil, un enfoque que, según explicó, busca garantizar condiciones de vida dignas para los trabajadores y sus familias, más allá de la simple compensación por inflación.
El anuncio ha reactivado el debate económico y social sobre cuánto debería ganar realmente un trabajador para cubrir sus necesidades básicas y cuál es el impacto de un aumento significativo del salario mínimo en la economía del país.
El salario mínimo vital: un cambio de enfoque
El salario mínimo vital y móvil no es un concepto nuevo en el ámbito internacional, pero sí lo es en la práctica normativa colombiana. De acuerdo con lo expuesto por el presidente Petro, este enfoque se inspira en los estándares de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que plantea que el salario debe permitir cubrir efectivamente la canasta básica familiar.
A diferencia del salario mínimo tradicional, que se calcula principalmente con base en inflación y productividad, el salario vital tiene en cuenta el costo real de vivir con dignidad. Esto incluye alimentación suficiente, vivienda adecuada, servicios públicos, salud, educación, transporte y otros gastos esenciales.
Según explicó Diego Garzón, jefe de la Oficina de Cooperación y Relaciones Internacionales del Ministerio de Trabajo, la OIT presentó este año a la mesa de concertación un informe técnico que cuantifica estos costos mínimos, con una visión centrada en el hogar y no solo en el trabajador individual.
¿Cuánto costaría vivir dignamente según la OIT?
El informe presentado por la OIT parte de una base nutricional mínima de 2.856 calorías diarias por adulto, lo que se traduce en un gasto mensual de aproximadamente $394.819 por persona. Para un hogar de cuatro integrantes, el costo de alimentación asciende a $1.288.654.
En materia de vivienda, el cálculo incluye condiciones de durabilidad, espacio y acceso a servicios. El costo estimado es de $143.099 por persona, equivalente a $587.192 para una familia promedio. Sumando servicios públicos, el valor total de este rubro llega a $711.780 mensuales.
A esto se agregan los gastos de salud, educación, transporte, vestuario, productos de aseo y comunicaciones. En conjunto, estos rubros representan $154.606 por persona, más $827.549 adicionales por hogar. En total, la OIT estima que un salario mínimo vital y móvil para una familia de cuatro personas debería rondar los $2.982.960 mensuales.
El desfase entre el salario actual y el salario vital
Con base en estos cálculos, y teniendo en cuenta que en promedio hay 1,5 personas asalariadas por hogar, el salario neto mínimo vital por trabajador sería de $1.988.640, mientras que el salario vital bruto —incluyendo aportes a seguridad social— alcanzaría los $2.147.731.
Desde el Ministerio de Trabajo y las centrales obreras, estas cifras sustentan la tesis de que el salario mínimo actual se encuentra por debajo de lo que organismos internacionales consideran suficiente para garantizar una vida digna. Bajo este enfoque, un aumento de dos dígitos para 2026 no sería una medida desproporcionada, sino un ajuste estructural.
El presidente Petro ha defendido esta postura señalando que, durante su gobierno, el salario mínimo real ha aumentado un 17,7 %, una cifra que —según él— supera ampliamente los incrementos registrados en administraciones anteriores.
Las dos orillas del debate salarial
La discusión sobre el aumento del salario mínimo volvió a evidenciar la distancia histórica entre empresarios y sindicatos. Desde el sector empresarial se advierte que incrementos elevados pueden elevar los costos de contratación, frenar la generación de empleo e impulsar la inflación a través del aumento de precios.
Las centrales obreras, en contraste, sostienen que un mayor salario mínimo fortalece el poder adquisitivo de los trabajadores, impulsa el consumo y genera un efecto dinamizador en la economía, que eventualmente se traduce en más empleo y crecimiento.
Una posición intermedia ha sido planteada por el Banco de la República. Su gerente, Leonardo Villar, ha señalado que un aumento mal calibrado puede generar presiones inflacionarias, pero también reconoció que un incremento bien diseñado puede producir beneficios económicos generales si se logra un equilibrio adecuado.
Desindexación y poder adquisitivo
Otro de los puntos clave en la discusión es la desindexación de varios cobros que hoy se calculan en salarios mínimos. El Ministerio de Trabajo ha propuesto que rubros como las Viviendas de Interés Social (VIS), las Viviendas de Interés Prioritario (VIP) y algunos servicios públicos dejen de estar atados al salario mínimo.
Según el Gobierno, esta medida permitiría que los aumentos salariales no se diluyan automáticamente en mayores costos para los hogares, preservando así el poder adquisitivo real de los trabajadores.
Especial atención se ha puesto en los servicios públicos, en particular el agua, uno de los cobros más sensibles a los ajustes anuales del salario mínimo.
Decisión por decreto y expectativa nacional
Ante la falta de acuerdo en la Comisión de Concertación de Políticas Salariales, todo apunta a que el salario mínimo para 2026 será fijado nuevamente por decreto presidencial, como ocurrió en los dos años anteriores.
Aunque la cifra final aún no se conoce, el anuncio de la incorporación del salario mínimo vital marca un giro relevante en la política salarial del país y anticipa un debate de fondo sobre el modelo económico, el costo de vida y el papel del Estado en la garantía de condiciones dignas para los trabajadores.
El decreto deberá expedirse antes del 30 de diciembre y definirá no solo el monto del salario mínimo, sino también el rumbo de una discusión que promete seguir vigente en 2026.

