Momentos de angustia y confusión vivieron los habitantes del municipio de Carepa, en el departamento de Antioquia, tras un enfrentamiento armado entre miembros del Ejército Nacional y la Policía Nacional, ocurrido el pasado fin de semana en la zona rural del sector conocido como Mirador La Cruz. El hecho dejó como saldo a un suboficial del Ejército herido, lo que ha despertado preocupación tanto en las autoridades como en la comunidad local.
Según el comunicado emitido por el Comando de la Décima Séptima Brigada, los hechos se presentaron durante una operación militar de estabilidad llevada a cabo por el Batallón de Ingenieros No. 17. La institución castrense calificó lo ocurrido como un “incidente de fuego amigo”, lo que implica que ambos grupos armados del Estado se enfrentaron entre sí por un error de identificación.
Un militar herido y evacuado tras el incidente
De acuerdo con el reporte oficial, el suboficial herido fue evacuado de inmediato y trasladado a un centro asistencial. Allí recibe atención médica especializada y su estado de salud es estable, según el parte médico más reciente.
“Como resultado de esta situación, un suboficial de esta unidad militar resultó herido. De manera inmediata fue evacuado y trasladado a un centro asistencial”, indicó el Ejército en el comunicado oficial.
Policía confirma versión y habla de confusión con grupo armado ilegal
Por su parte, la Policía del Urabá antioqueño explicó que el intercambio de disparos se habría originado cuando dos agentes vestidos de civil observaron a personas con armamento de largo alcance, lo que les hizo pensar que se trataba de integrantes de un grupo armado ilegal.
“En el procedimiento observaron a dos ciudadanos con armamento de largo alcance, por lo que se produce un intercambio de disparos”, indicó la Policía en su comunicado.
Tanto la Policía como el Ejército anunciaron la apertura de investigaciones internas para establecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en las que ocurrió este confuso episodio. La Policía añadió que se ha iniciado una indagación disciplinaria bajo la dirección del comando del Departamento de Policía Urabá.
Comunidad impactada por el cruce de fuego
El hecho ocurrió en una zona residencial del municipio de Carepa, lo que generó miedo e incertidumbre entre la población. En redes sociales circularon videos del momento del tiroteo, en los que se evidencian los impactos del enfrentamiento entre uniformados de ambas instituciones.
Este episodio revive el debate sobre la coordinación y comunicación entre fuerzas de seguridad en regiones complejas como el Urabá antioqueño, donde operan grupos armados ilegales y se requiere una actuación unificada para garantizar la seguridad de la población civil.
Carepa, un municipio marcado por la violencia del Clan del Golfo
El municipio de Carepa ha sido escenario de múltiples hechos de violencia relacionados con el Clan del Golfo, grupo armado ilegal responsable del denominado “plan pistola”, una estrategia criminal que ha tenido como blanco a miembros de la fuerza pública.
Uno de los hechos más graves fue el asesinato del subintendente Deimer Díaz Pérez, miembro del Grupo Gaula, quien fue atacado dentro de un establecimiento público. Tras el homicidio, el coronel Jovanni Cepeda Sanabria, comandante de la Policía en Urabá, informó que se desplegaron todas las capacidades de investigación judicial, incluyendo la participación de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) y el Gaula.
“En este momento tenemos desplegadas todas las capacidades de policía judicial, tanto nuestra Sijín como nuestro Gaula”, señaló el oficial.
Medidas de seguridad implementadas en abril
Durante el periodo de mayor tensión en abril de 2025, las autoridades adoptaron medidas preventivas como la prohibición del tránsito de motocicletas con parrillero entre las 7:00 p. m. y las 5:00 a. m., así como un toque de queda nocturno desde la medianoche hasta las 5:00 a. m. Estas decisiones buscaban reducir los riesgos de ataques armados y controlar la movilidad en zonas críticas.
Llamado a mejorar la coordinación interinstitucional
El reciente enfrentamiento entre uniformados del Estado pone en evidencia la urgente necesidad de fortalecer los mecanismos de coordinación y comunicación entre las fuerzas armadas y de policía, especialmente en territorios con presencia de actores armados ilegales y complejos problemas de orden público.
Una estrategia efectiva de seguridad interinstitucional no solo previene incidentes de fuego amigo, sino que también mejora la capacidad de respuesta frente a amenazas reales, protegiendo tanto a la fuerza pública como a los civiles.