Un avión de la Marina de México se estrelló este lunes en las inmediaciones de Galveston, Texas, mientras cumplía una misión de carácter humanitario vinculada al traslado médico de menores con quemaduras severas. El accidente dejó al menos tres personas fallecidas y activó un amplio operativo de rescate coordinado entre autoridades mexicanas y estadounidenses.

La Secretaría de Marina (Semar) informó que la aeronave siniestrada, un King Air ANX 1209, formaba parte del “Plan Marina” y operaba en conjunto con la Fundación Michou y Mau, organización dedicada a la atención especializada de niños víctimas de quemaduras. El vuelo tenía como objetivo brindar apoyo médico, cuando presentó el accidente durante su aproximación en territorio estadounidense.

A bordo del avión viajaban ocho personas: cuatro integrantes de la tripulación naval y cuatro civiles. Entre los pasajeros se encontraba un paciente pediátrico, un niño de dos años con quemaduras, quien falleció tras el desplome de la aeronave. De acuerdo con la información oficial, la Guardia Costera de Estados Unidos logró rescatar a seis personas, cuatro con vida y dos sin signos vitales. Posteriormente, las autoridades confirmaron una tercera víctima mortal.

Tras el impacto, se activaron de inmediato los protocolos de búsqueda y rescate en coordinación con las autoridades estadounidenses. En un primer comunicado, la Semar indicó que continuaban los esfuerzos para localizar a dos personas más que permanecían dentro del avión, mientras se desarrollaban las labores de recuperación en la zona del siniestro.

La institución naval no reveló la identidad de las víctimas y subrayó que la misión tenía fines exclusivamente humanitarios, orientados al traslado médico especializado de pacientes pediátricos. Asimismo, anunció que se llevarán a cabo las investigaciones correspondientes para esclarecer las causas del accidente y determinar las circunstancias exactas del desplome.

En paralelo, el Gobierno de México mantiene coordinación con el Consulado mexicano en Houston para atender los trámites consulares y brindar apoyo a las familias de las personas afectadas.

Según datos del portal Flight Radar, la aeronave había despegado del aeropuerto de Mérida, en el estado de Yucatán, y perdió contacto sobre la bahía de Galveston, cerca del aeropuerto internacional Scholes. El siniestro se convierte en el segundo accidente aéreo que involucra a ciudadanos mexicanos en el mes de diciembre, luego de que el pasado 15 de diciembre un jet privado se estrellara en el centro de México, causando la muerte de diez personas.

La Fundación Michou y Mau, creada en 1998, ha sido clave en la atención de miles de niños mexicanos con quemaduras graves, así como en la concientización y el desarrollo de programas asistenciales para menores en situación crítica. El accidente ha generado conmoción tanto en México como en Estados Unidos, debido al carácter humanitario de la misión y a la presencia de menores entre los ocupantes del vuelo.

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