El Senado de Colombia aprobó este martes la reforma laboral propuesta por el gobierno del presidente Gustavo Petro , incorporando todas sus exigencias. Esta aprobación representa una significativa victoria legislativa para Petro en medio del clima político tenso tras el atentado al precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay . La reforma, que busca mejorar las condiciones laborales de más de 10 millones de trabajadores formales, aún debe superar el proceso de conciliación con el texto aprobado en la Cámara de Representantes antes del cierre del Congreso el 20 de junio.

La jornada legislativa incluyó varios triunfos del oficialismo, como la restitución del carácter laboral al contrato de aprendices del SENA , la eliminación de artículos que permitían contratación por horas , y el aumento de recargos por trabajo nocturno, dominical y festivo . Sin embargo, la propuesta de Petro de convocar una consulta popular sobre cuestiones laborales y de salud fue rechazada abrumadoramente por el Senado. Pese a este revés, el presidente insistió en mantener activa la consulta por decreto hasta que finalice el proceso de conciliación de la reforma.

La reforma laboral aprobada busca establecer una jornada máxima de ocho horas diarias y 42 semanales, con recargos del 100% por trabajo en días festivos y dominicales. Además, se propone la eliminación de la contratación por horas y la inclusión de los aprendices del SENA en el régimen laboral, garantizando sus derechos laborales. Estas medidas han sido celebradas por sindicatos y organizaciones sociales como un avance en la protección de los derechos de los trabajadores.

Por otro lado, la consulta popular propuesta por Petro tenía como objetivo consultar a la ciudadanía sobre aspectos clave de la reforma laboral y del sistema de salud. Sin embargo, el Senado rechazó la iniciativa, argumentando que la convocatoria de una consulta popular corresponde al Congreso y no al Ejecutivo. El presidente Petro ha manifestado su intención de continuar con la consulta por otros medios, aunque no ha especificado cuáles serán esos mecanismos.

La aprobación de la reforma laboral y el rechazo a la consulta popular reflejan las tensiones políticas entre el Ejecutivo y el Legislativo en Colombia. Mientras el gobierno busca implementar cambios estructurales en el ámbito laboral y de salud, sectores de la oposición y del empresariado expresan preocupaciones sobre el impacto de estas reformas en la economía y en la generación de empleo.

En conclusión, la reforma laboral aprobada por el Senado representa un avance en la agenda del presidente Petro, pero también pone de manifiesto las divisiones políticas y sociales en torno a las reformas propuestas. Será necesario un proceso de conciliación entre las distintas ramas del poder público y un diálogo continuo con la sociedad para garantizar que las reformas respondan a las necesidades de los trabajadores y al desarrollo económico del país. Fuentes

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