En un evento público en Boyacá, el presidente Petro solicitó a varios ex miembros del M19 que ondearan la bandera del grupo guerrillero en honor a Carlos Pizarro, líder político asesinado hace 34 años.
En un discurso cargado de emotividad y simbolismo, el presidente Petro defendió su solicitud argumentando que la bandera del M19 no debe permanecer escondida ni olvidada, sino que debe ser recordada y honrada en la memoria de aquellos que lucharon por cambiar el curso de la historia colombiana. Según sus palabras, Carlos Pizarro, quien fue miembro del M19 y posteriormente líder político, merece ser recordado como un individuo que dedicó su vida a buscar un cambio profundo en el país.
Sin embargo, la solicitud del presidente Petro ha generado fuertes críticas y reacciones encontradas en la sociedad colombiana. Algunos consideran que ondear la bandera de un grupo guerrillero en un evento oficial es inapropiado y podría ser interpretado como un respaldo implícito a la violencia y la lucha armada. Otros argumentan que este gesto es una muestra de falta de sensibilidad hacia las víctimas del conflicto armado y sus familias, y que glorificar la figura de Carlos Pizarro y el legado del M19 podría ser interpretado como una apología al terrorismo.
