Una nueva revelación sacude el panorama político y de seguridad en Colombia. Según información compartida por el periodista Julio Sánchez Cristo, director de La W, durante un vuelo reciente del presidente Gustavo Petro, se vivieron momentos de extrema tensión tras conocerse una alerta sobre un presunto atentado contra Petro. La situación llevó incluso a considerar un aterrizaje de emergencia fuera del país.
En medio de la incertidumbre, el mandatario colombiano —tras ser informado de la amenaza— evaluó la posibilidad de desviar el vuelo hacia países vecinos. “El presidente planteó la posibilidad de aterrizar en Panamá o en Venezuela”, afirmó Sánchez Cristo, resaltando el nivel de angustia vivido en la cabina del avión presidencial.
Restricciones técnicas y decisión final: aterrizar en Pereira
No obstante, la opción de aterrizar fuera de Colombia fue rápidamente descartada. Las autoridades y el equipo de seguridad le explicaron al jefe de Estado que no era viable ejecutar un aterrizaje en territorio extranjero. Esta limitación logística obligó a tomar una decisión urgente: dirigirse a Pereira, ciudad que ofrecía las condiciones más seguras en ese momento para recibir la aeronave.
“Fueron absolutamente dramáticas las conversaciones en el avión”, aseguró Sánchez Cristo, detallando que incluso los pilotos mostraron su preocupación durante el vuelo. Las comunicaciones mantenidas en tiempo real con sus familiares reflejaron el nivel de alerta del equipo técnico y humano a bordo, en una operación marcada por el riesgo y la incertidumbre.
Este incidente se suma a una creciente preocupación por la seguridad presidencial, en un contexto político cada vez más polarizado y con antecedentes de amenazas contra figuras del poder ejecutivo en el país.
La caja negra contiene las conversaciones más sensibles
Otro de los elementos más reveladores en torno a este episodio es la existencia de un registro detallado en la caja negra del avión presidencial. De acuerdo con el director de La W, este dispositivo contiene las conversaciones registradas durante la crisis aérea y podría ser clave para esclarecer el alcance real de la amenaza.
“Todo eso está en una conversación en la caja negra del avión que fue bastante dramática”, puntualizó Sánchez Cristo. La información, aunque aún no ha sido divulgada oficialmente, podría aportar datos relevantes sobre las decisiones tomadas, los niveles de alerta activados y las medidas aplicadas en tiempo real para proteger la integridad del mandatario.
El caso también podría generar un debate institucional sobre los protocolos de reacción ante situaciones de riesgo extremo para figuras presidenciales, así como sobre la coordinación entre las fuerzas armadas, la aviación presidencial y los organismos de inteligencia del Estado.