La Fiscalía General de la Nación solicitó oficialmente a su contraparte en Portugal la aplicación de medidas cautelares urgentes para asegurar la entrega del empresario Diego Marín Buitrago, conocido como alias Papá Pitufo, quien fue beneficiado recientemente por un fallo del Tribunal Supremo de Justicia portugués que le concedió la libertad mediante un recurso de habeas corpus. Esta decisión judicial dejó sin efecto una orden previa del Tribunal de Apelación de Oporto que ordenaba su detención con fines de extradición a Colombia.
La Fiscalía colombiana enfatizó la necesidad de medidas como la prohibición de salida del país, la retención del pasaporte y el monitoreo electrónico, con el objetivo de evitar una posible fuga. También solicitó su presentación periódica ante autoridades judiciales y la implementación de residencia vigilada, mientras se resuelve el proceso legal de fondo.
Un fallo que reconfigura el proceso de extradición
El recurso de habeas corpus fue concedido con el argumento de que se había excedido el tiempo legal de detención preventiva mientras se tramitaba su extradición. Esta resolución, que revirtió una decisión emitida el 29 de mayo, ha generado preocupación en Colombia sobre la posibilidad de que Diego Marín Buitrago eluda la justicia, a pesar de que aún está pendiente la decisión de segunda instancia sobre su solicitud de asilo político en territorio portugués.
En respuesta, la Fiscalía colombiana emitió un comunicado subrayando que respetan las decisiones judiciales de los países aliados y reiteró su compromiso de continuar los trámites jurídicos dentro de los protocolos internacionales vigentes para lograr la entrega del procesado. “Continuaremos adelantando los trámites jurídicos correspondientes”, señaló la entidad.
Defensa asegura que no se ha cerrado el caso
Por su parte, la defensa de alias Papá Pitufo, encabezada por el abogado Camilo Andrés Rojas, explicó que la libertad concedida no representa una absolución, sino una medida temporal de garantía procesal. En declaraciones recogidas por El Tiempo, Rojas aseguró que “esto fue una medida procesal para garantizar derechos fundamentales, no una absolución ni una terminación anticipada del proceso”.
La defensa también recalcó que Marín ha estado presente en todas las etapas del proceso judicial en Portugal y continúa vinculado jurídicamente al proceso penal en Colombia. Además, reiteró que su cliente no tiene intención de evadir la justicia, y que se encuentra a la espera de la programación de la audiencia de acusación en su país de origen.
