Los ciudadanos piden justicia, la Fiscalia está preparada, pero seguimos en manos del Tribunal que va a tres velocidades, “lento, despacio y quieto”. A veces pareciera que los tiempos de la justicia en Colombia fueran a paso de tortuga.
Miren esto: han pasado 6 meses desde que se inició el proceso judicial por el escándalo de la Avenida de los Colibríes, ¡Y todavía no arranca el juicio!
Para que se hagan una idea: desde el 22 de octubre de 2024 que se presentó el caso, la ley da un plazo de 240 días para adelantar las audiencias de formulación de acusación, preparatoria y comenzar el juicio oral.
Desde entonces, el caso que inició tan caliente, se enfrió y no avanza y el tiempo sigue corriendo: Ya van 182 días transcurridos y sólo quedan 58 días para resolver y terminar las audiencias pendientes e iniciar el juicio oral. Si no se cumple ese plazo, los detenidos podrían quedar en libertad por vencimiento de términos, a pesar de la gravedad de los hechos y del informe de la Contraloria General donde cuantifica los presuntos sobrecostos y faltantes de obra en cerca de 18 mil millones de pesos.
Le puede interesar: $17.630 millones de detrimento en la Avenida Los Colibríes halló la Contraloría General de la República
!Ojo con esto¡ Que se levante la medida de detención no significa que los implicados sean inocentes ni que el caso haya terminado. Esto significa que el caso está lento, muy lento y el abogado vencimiento de términos nuevamente es el mejor penalista. Y eso es lo que no puede seguir pasando. La justicia tiene la responsabilidad de actuar con celeridad y compromiso con la verdad, ¿Qué sucedió al interior del proceso que empezó tan contundente y se está aflojando? No me corresponde como periodista decir quiénes son culpables. Pero sí es mi responsabilidad alertar para que el proceso avance con claridad, prontitud y respeto por los ciudadanos que siguen esperando respuestas.