Es el momento perfecto para reconocer a las grandes estrellas de nuestra tierrita, esos personajes que a veces nos hacen sentir un poquito… Inocentes.
JUAN PABLO GALLO: Dicen las malas lenguas que un predio de $750 millones terminó costando $2.200 millones. También que inauguró rotondas “falsas” y que su habilidad para los negocios lo llevó a conseguir un apartamento estrato 10 por $400 millones, todo en solo tres meses de ser alcalde. ¿Coincidencias? Eso sí, comparte vecindad con Felipe Córdoba en Malabar, el Condominio más exclusivo de Pereira, donde los rumores nunca faltan. Aunque se declara opositor de Petro, dicen que en privado son tan cercanos que votó positivo a varias de sus reformas. ¡Qué capacidad de reconciliación! Su gran talento lo valora la Fiscalía y la Corte Suprema.
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CARLOS MAYA: Amigo de la naturaleza, especialmente de los colibríes, con $50.000 millones de razones para demostrarlo. Comparte con su primo Gallo ese talento único para los negocios. Algunos lo acusan de pavimentar menos pero pagar más; todo un crack con los números. Pasó de un modesto apartamento a una espectacular mansión en Malabar, el exclusivo barrio que también alberga a su primo, ¡Y todo esto en menos de 4 años! Lamentablemente, tuvo que dejar de lado su otra pasión: volar a estudiar a Canadá.
ROBERTO JIMÉNEZ: El alcalde de Dosquebradas es un amante de las cebras de tránsito y de las cabalgatas, tanto que promete traer más, aunque algunos protesten. ¿Y las obras? Bueno, tal vez el próximo año. Mientras tanto, su agenda parece más cargada de fiestas que de asfalto.
ANÍBAL HOYOS: El orgullo de Belén de Umbría y aliado de Petro en Risaralda. Su voto a favor de la reforma tributaria y la paz total ha sido, según sus fans, un acto de valentía… aunque algunos digan que esos votos “estrangulan” un poco. Cercano a las asociaciones del pueblo, lleva años como miembro y, según dicen, nunca se entera de los contratos millonarios que pasan por ellas. Eso sí, su sensibilidad está intacta: si lo critican, llora y reclama justicia.
VÍCTOR TAMAYO: Siempre pensando en la salud… de las finanzas públicas. La última “vacuna” que nos aplicó fue por $19.500 millones para el Coliseo Mayor, que no estuvo listo para los Juegos Nacionales. El contratista, eso sí, ya disfruta de su retiro en España. Tamayo sigue dejando legado, esta vez con sus hijos, quienes aspiran a continuar las obras que su padre dejó “en proceso”.
ÁLVARO TRUJILLO: El contralor de Dosquebradas es todo un artista: canta como Leonardo Favio y hasta inspira a su equipo. Tanto es así que dos de sus funcionarias han entonado “canciones” muy populares en la Fiscalía. ¡Un verdadero fenómeno!
DIPUTADOS DARIO MARULANDA Y ANDRÉS GIL: ¿Quién dijo que los diputados no trabajan? Marulanda y Gil han demostrado su compromiso con el conocimiento, asistiendo a una conferencia en Grecia sobre sustancias, por solo $19 millones. Regresaron tan inspirados que su informe de dos páginas incluye unas cuantas fotos del viaje. Y como el aprendizaje nunca para, Gil también visitó Washington D.C. ¡Todo sea por el desarrollo de Risaralda!