Unas canchas de arcilla cerradas en malla y plástico, como no hay graderías los espectadores están viendo los partidos desde un montículo de tierra, tampoco hay camerinos y los deportistas deben cambiarse bajo unas carpas improvisadas afuera y nada más. Algo que tres volquetas y una aplanadora harían en una semana, porque no hay nada de infraestructura. Ahí no sale el gobernador Tamayo a sacar pecho ante el fracaso con este contrato, no hay disculpa de que las obras quedan, esto era para los Juegos Nacionales y no le cumplió a los deportistas ni al país y por eso lo investiga la Procuraduría (Investigación contra gobernador de Risaralda por presuntas irregularidades en construcción de canchas de tenis para los juegos nacionales 2023)
A Benjamin Figueroa, representante del consorcio TENIS PAG, le abonaron casi 3.000 millones de pesos, firmó el 13 de junio y casi 5 meses después entrega unas canchas encerradas en malla sencilla. Acá podemos valorar la calidad de diputados que tiene Risaralda, no salió ninguno a hacer control y pasan de largo con sus cuotas burocráticas bajo el brazo que les interesa más que cuidar el manejo de los recursos.
¡Lo denunciamos y no nos equivocamos…! no cumplieron!: Ojo a estos contratos $188.628 millones: canchas de Tenis $8.890 millones y VERGÜENZA NACIONAL