El Ejército denunció que tropas del Comando Específico del Cauca, que se encontraban adelantando operaciones en zona rural de Buenos Aires, fueron víctimas de una asonada por parte de la comunidad para sacar a los militares del área donde se encontraban. Además, incineraron dos vehículos.
«Esta asonada es una respuesta a las operaciones militares en contra del narcotráfico. Producto de este evento fueron incinerados dos vehículos de la Policía Nacional y uno del Ejército», declararon las autoridades.
Los grupos armados organizados residuales estructuras Dagoberto Ramos y Jaime Martínez continúan en connivencia con un sector de la población para no permitir el avance de las tropas del Ejército que ha llegado hasta áreas base y corredores de movilidad que afectan las cadenas del narcotráfico que son parte de sus economías ilícitas.
Por eso, el Ejército instó a la comunidad a no obstruir las operaciones militares, ni agredir a los uniformados, “porque esto puede ser consecutivo de tipos penales como los consagrados en los artículos 226, 429 y 469, del Código Penal Colombiano”.
“Este Comando continuará empleando todas sus capacidades por el bienestar, tranquilidad y seguridad de esta región del país, bajo el respeto de los derechos humanos y cumplimiento estricto de las disposiciones del derecho internacional humanitario”, enfatizó el Ejército en su comunicado.