El reciente rescate de 57 militares en El Tambo, Cauca, marca un hito en la lucha contra el crimen organizado en Colombia. Según informó el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, la operación fue ejecutada sin que se disparara una sola bala, lo que calificó como una señal clara de que “al Estado no se le ataca sin consecuencias”.
Los uniformados habían sido retenidos por comunidades instrumentalizadas por la estructura criminal Carlos Patiño, vinculada al cartel de alias Mordisco, en la vereda La Hacienda. Tras días de tensiones y negociaciones, se logró una liberación que fue celebrada como un triunfo logístico y estratégico de las Fuerzas Militares.
En declaraciones a Caracol Radio, el ministro Sánchez destacó: “Este rescate fue totalmente limpio, fue una ‘Operación Justicia’ impecable que deja claro que rescatamos a nuestros militares donde se encuentren”.
20 capturados y recompensas para los cabecillas
Durante el desarrollo de la operación, 20 personas fueron capturadas. El Ministerio de Defensa aseguró que todos deberán responder ante la justicia por los delitos cometidos contra integrantes de la Fuerza Pública. “Aquí nadie puede atacar al Estado, mucho menos a quienes lo defienden”, afirmó con contundencia Pedro Sánchez.
Además, envió un mensaje directo a los cabecillas involucrados en estos hechos. Haciendo referencia a alias Kevin, Zamora, Giovanni y Tabárez, anunció que existen recompensas de hasta 500 millones de pesos por información que permita su captura. “Alias Kevin vive escondido, borracho y rodeado de prostitutas, demostrando lo que realmente es”, declaró el ministro, quien enfatizó que la mejor decisión para estos delincuentes es la desmovilización.
Llamado a la desmovilización y rechazo social en el Micay
El mensaje del Gobierno fue contundente: quienes integran estas estructuras armadas deben entregarse y someterse a la justicia, antes de que sean alcanzados por la fuerza legítima del Estado. Sánchez advirtió que, en caso contrario, se intensificarán las operaciones para capturarlos en cualquier punto del país.
A pesar del tono firme, el ministro abrió la puerta a una salida menos violenta. “Incluso al entregarse se les ofrece un apoyo económico importante, especialmente si vienen con armamento”, indicó. A su vez, hizo un llamado para que cesen las acciones criminales contra la población civil, como los asesinatos de menores de edad ocurridos en zonas como El Plateado.
En su mensaje final, Sánchez fue claro: “Que no le causen más daño a la población del Micay, ellos no los quieren, la comunidad ya no respalda a estos grupos armados”.
