En una directriz que marca el pulso de la recta final de su administración, el presidente Gustavo Petro instruyó a su equipo de comunicación y estrategia política a “radicalizar el discurso” durante los meses que le restan en el poder. La decisión, revelada en un encuentro privado, busca reforzar la narrativa de su gobierno frente a la oposición y consolidar el respaldo de sus bases, especialmente en medio de un escenario político de creciente polarización.

En la reunión participó el asesor político mexicoestadounidense Germán Trejo, reconocido por su trabajo en campañas presidenciales del Partido Demócrata en Estados Unidos. Su presencia ha sido interpretada como una señal de que la estrategia no solo apunta a fortalecer el mensaje interno, sino también a darle un aire más técnico y calculado en la manera de proyectar la imagen presidencial.

Una estrategia para mantener la iniciativa política

El llamado de Petro a intensificar el tono de su discurso llega en un momento en que el gobierno enfrenta críticas por los resultados en áreas como seguridad, economía y la implementación de las reformas sociales. Según fuentes cercanas a la Presidencia, el objetivo sería no ceder espacio en el debate público y mantener la iniciativa frente a la narrativa de sus opositores, que han intensificado los cuestionamientos sobre la viabilidad de su proyecto político.

El concepto de “radicalizar” en este contexto no se refiere únicamente a un lenguaje más confrontativo, sino a una defensa más firme de las banderas del gobierno: la transición energética, la reforma agraria y la justicia social. En ese sentido, se espera que el discurso presidencial se enfoque en marcar diferencias con sectores tradicionales de la política, reforzando la idea de que su administración representa una alternativa frente al “continuismo”.

El papel de Germán Trejo en la estrategia comunicacional

La participación de Germán Trejo en la reunión ha despertado interés en el ámbito político. Su trayectoria en la asesoría de campañas del Partido Demócrata lo posiciona como un experto en comunicación política de alto impacto. Trejo ha trabajado en procesos de movilización de bases y en la construcción de mensajes enfocados en sectores populares, lo que encajaría con la intención de Petro de consolidar su narrativa en torno a la lucha contra la desigualdad.

El asesor habría recomendado reforzar el contacto directo con la ciudadanía a través de canales digitales y medios públicos, como el sistema RTVC, que juega un papel estratégico en la difusión de los mensajes presidenciales. En este marco, la comunicación no solo tendría un carácter defensivo, sino también propositivo, buscando encender el debate en torno a los logros y promesas del actual gobierno.

¿Qué busca Petro con un discurso más radical?

El giro en el tono del discurso presidencial plantea varias preguntas sobre sus efectos políticos y sociales. Para algunos analistas, la estrategia busca proyectar fortaleza frente a la opinión pública y evitar que la narrativa de la oposición defina el cierre de su mandato. Sin embargo, otros consideran que el riesgo radica en profundizar la polarización en un país que ya enfrenta divisiones marcadas en torno a los grandes temas nacionales.

En términos de comunicación política, radicalizar el discurso podría fortalecer la identificación con su base electoral más fiel, pero también alejar a sectores moderados que valoran el consenso y la negociación. En este escenario, el impacto dependerá de la capacidad del presidente y su equipo para equilibrar la confrontación con propuestas concretas que respondan a las preocupaciones de la ciudadanía.

La gran incógnita es si esta estrategia le permitirá a Petro dejar una huella más sólida en su último tramo de gobierno o si, por el contrario, intensificará las tensiones políticas y sociales. ¿Será esta apuesta el camino para reforzar su legado o el detonante de una nueva ola de controversias?

Entérate con El Expreso