En una situación que mantuvo a España en vilo durante días, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció este lunes su decisión de seguir al frente del Ejecutivo, despejando la incertidumbre que se había generado tras su amenaza de dejar su cargo debido al “acoso personal que asegura sufrir por parte de la oposición”.
Desde el Palacio de la Moncloa, Sánchez declaró con determinación: “He decidido seguir, seguir con más fuerza si cabe”. Esta afirmación concluyó la incertidumbre que se había abierto el miércoles pasado, cuando el presidente anunció que se tomaría unos días para meditar su renuncia, denunciando el «acoso y derribo» de la derecha y la ultraderecha a su familia, después de que se conociera la apertura de una investigación judicial a su esposa, Begoña Gómez, por presunta corrupción.
El presidente socialista reconoció la influencia de las manifestaciones que tuvieron lugar en Madrid y otras partes de España durante el fin de semana en su reflexión. Estas muestras de apoyo y movilización ciudadana, según Sánchez, influyeron decisivamente en su decisión, descartando así la posibilidad de unas nuevas elecciones un año después de los comicios anteriores.
Sánchez, de 52 años, lleva al frente del Gobierno español desde 2018, en tres mandatos distintos, tejiendo alianzas parlamentarias con diferentes sectores políticos, desde la extrema izquierda hasta los nacionalistas catalanes y vascos.
El presidente subrayó que la única manera de revertir la situación actual, marcada por la degeneración del debate político, es que la mayoría social se movilice en una apuesta decidida por la dignidad y el sentido común. En sus palabras, esto permitiría poner «freno a la política de la vergüenza que llevamos demasiado tiempo sufriendo», enfatizando que esta situación no se trata solo del destino de un dirigente particular, sino de decidir qué tipo de sociedad quieren ser los españoles.