Por: Juan Manuel Sanchez Mesa

Aún recuerdo cuando escuché por primera vez a mi compañera columnista Paloma Valencia en un evento. Fue en el foro: “Democracia plebiscitaria vs. Democracia liberal” organizado por mi universidad, la Universidad Externado de Colombia, el 23 de febrero de 2023. Ahí compartió micrófono con otras personalidades de la política como Roy Barreras y David Racero. A pesar de que Valencia era la única representante de la oposición en ese evento, fue la única que realmente dijo algo interesante de entre sus compañeros de la política. 

“Es muy grave la tendencia que uno empieza a ver, de deslegitimar todo lo que no es afín”, fue una frase de la doctora Valencia en aquel foro. Además, la senadora mostró su preocupación de que el Gobierno Nacional decidiera “destruir” todos los avances realizados por gobiernos anteriores para suplir las necesidades de la sociedad colombiana y también le exigió al presidente escuchar a la oposición para construir sus reformas sociales.

Algo debió cambiar en la senadora para que un año después, de ese foro, apareciera en un video titulado “Vamos a insistir en no hacer quorum y buscar todos los mecanismos para detener la reforma pensional”. Pasó del discurso del diálogo y el debate al filibusterismo. Una táctica usada por congresistas para bloquear o retrasar el debate o la votación de un proyecto de ley. 

Esta táctica se manifiesta de diferentes maneras, como desintegrar el quorum, que es el número de individuos necesarios para que el Congreso de la República tome decisiones. De manera que, cada vez que se iba a votar la reforma pensional, la oposición en cabeza de Valencia se salía del recinto para tener que suspender la votación. Esto se hizo en el Senado hasta en 5 ocasiones. 

El filibusterismo también se revela en la radicación de un centenar de recusaciones o pedir un sinnúmero de intervenciones que nada tengan que ver con el debate del proyecto de ley para seguir ralentizando el trámite. Algo que precisamente hizo la oposición, demostrando que no tenían ninguna intención de debatir ni participar en el proyecto de ley. 

¿Las maniobras desplegadas por la oposición de Paloma Valencia son ilegales? De ninguna manera, todas fueron de acuerdo con la ley. Pero quebrantan la legitimidad de nuestro Estado Libre y Soberano al impedir a las mayorías decidir, evitando que el Congreso de la República tome decisiones por falta de tiempo. 

La reforma pensional fue aprobada el 14 de junio de 2024, a pesar del filibusterismo de la oposición, pero con ciertas irregularidades en su trámite. Estas irregularidades fueron el motivo para que la doctora Valencia presentara una demanda de inconstitucionalidad contra la reforma, argumentando, entre otras cosas, la supresión o elusión del debate democrático. 

¿Es este un acto de hipocresía en cabeza de la líder de la oposición? Me atrevería a decir que sí. En todo el trámite de la reforma pensional, la oposición de manera explícita, descarada y desvergonzada había buscado archivar la reforma por falta de tiempo y, como eso no funcionó, decidió hundir la reforma por medio de la Corte Constitucional, argumentando que no se debatió lo suficiente. 

Es esta la estrategia del cinismo. Una táctica donde no importa la coherencia o la honradez de los métodos de oposición, lo único que importa es impedir cualquier avance del Gobierno Petro, aunque eso implique un avance para la Nación. Todo con un solo propósito: Deslegitimar todo lo que no es afín, ¿le son familiares estas palabras? No se sorprenda si este plan se utiliza en contra de la revivida reforma laboral. 

Merece la pena recordar otra frase de Paloma Valencia en el foro en el Externado: “Cuando uno es presidente de un país, tiene que hablar con los que piensan igual que uno, pero también con los que piensen distinto. Y dialogar, no es solamente oírlos, es estar dispuesto a entender lo que están diciendo”. Quizás para la senadora Paloma de 2023, la candidata presidencial Valencia no sería una presidenta apropiada para esta Nación. 

Y es que después de todas estas jugadas al son de hipocresía ¿Es posible que Paloma Valencia sea la opción que satisfaga la falta de honorabilidad, decencia y dignidad que ha padecido la presidencia de la República de Colombia históricamente? Yo creo que no.

  1. https://www.youtube.com/watch?v=jSxKNUTMWEw

2. https://www.lasillavacia.com/opinion/es-inconstitucional-la-reforma-pensional-por-falta-de-debate/

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