El 27 de septiembre de 2025 comenzó en el sur de Australia una búsqueda desesperada que mantuvo en vilo a la comunidad durante casi una semana. Gus, un niño de cuatro años, desapareció en circunstancias aún confusas mientras se encontraba en la granja de sus abuelos, ubicada en un área remota a 40 kilometros en la localidad de Yunta, Australia, al rededor de las 5:00 pm. Lo que en un inicio fue un operativo de rescate, pronto se transformó en una operación de recuperación tras no hallar ningún rastro sobre su paradero.
Durante seis días, equipos de la policía, bomberos, voluntarios y expertos en rescate rastrearon cada metro del terreno árido y hostil de la región. Helicópteros, drones y perros especializados se sumaron a una búsqueda marcada por altas temperaturas durante el día y frío intenso en las noches. El caso generó un enorme interés mediático y una ola de solidaridad en todo el país, con cientos de personas ofreciendo ayuda para encontrar al menor.
Una desaparición en circunstancias desconcertantes
El Sábado 27 de septiembre, Gus había viajado junto a sus padres desde Adelaida para pasar unos días en la granja familiar. Según los testimonios, el niño jugaba en la arena cerca de la vivienda cuando, en cuestión de minutos, desapareció de la vista de los adultos. El menor se encuentra desaparecido en una zona conocida como ‘outback’, nombre popular del vasto interior árido y semidesértico de Australia, una de las regiones más inhóspitas y despobladas del planeta lo que complicó inmediatamente cualquier intento de rastreo.
La familia alertó de inmediato a la policía local, que inició un operativo esa misma tarde. Con el paso de las horas, la búsqueda se amplió y se convirtió en uno de los despliegues más grandes registrados en la zona en los últimos años. Autoridades confirmaron que participaron más de 50 personas entre personal oficial y voluntarios, en un esfuerzo por cubrir un área que supera los 100 kilómetros cuadrados segun informes
«Alrededor de las 5 de la noche del sábado, Gus estaba jugando afuera en la arena como lo hace normalmente, su abuela salió a buscarlo y no pudo encontrarlo, así que buscaron por los alrededores hasta que llamaron a los servicios de emergencia», “Prevemos que se ha extraviado y es ahí donde estamos concentrando nuestros esfuerzos de búsqueda. Dijo el superintendente de Yorke Mid North, Mark Syrus.
La incertidumbre creció cuando no se hallaron rastros claros que indicaran hacia dónde pudo haberse dirigido el menor. Se descartaron desde el inicio hipótesis relacionadas con secuestro, y las autoridades se centraron en la posibilidad de que el niño se hubiera desorientado en el extenso y peligroso terreno.
Hasta ahora, la única señal de Gus ha sido una huella encontrada el martes, a unos 500 metros de donde fue visto por última vez.
«Tenemos que recordar que él, en realidad vive en la propiedad y es posible que haya dejado una huella allí hace un par de días, incluso antes de desaparecer», dijo el oficial a cargo de la región de Yorke y Mid North, el superintendente Mark Syrus. También ha mencionado que no encuentra probable que un tercero esté involucrado con la desaparición del niño, sin embargo, se están haciendo las debidas investigaciones.
El operativo y la angustia de la comunidad
Los primeros tres días de búsqueda estuvieron marcados por la esperanza. Helicópteros sobrevolaron la región, mientras brigadas de voluntarios recorrían a pie largas distancias en condiciones extremas. Se instalaron puntos de hidratación y campamentos para coordinar los esfuerzos, mientras la policía solicitaba a los residentes de localidades cercanas que revisaran galpones, establos y depósitos en busca de cualquier señal.
Este viernes, 03 de octubre, el subcomisario Ian Parrott comunicó la difícil decisión de reducir el operativo, reconociendo públicamente que es poco probable encontrar a Gus con vida.
«Aunque todos esperábamos un milagro, ese milagro no se produjo», declaró Parrott ante los medios. «Durante las últimas 48 horas, pese a las recomendaciones profesionales que indicaban que las posibilidades de supervivencia eran mínimas, mantuvimos e incluso intensificamos los esfuerzos para localizarlo y devolverlo a su familia.» Según reportes oficiales.
