Con movimientos de tierra que marcan el inicio de una nueva era para el balompié departamental, arrancó la construcción de la cancha sintética de la Liga Risaraldense de Fútbol, proyecto impulsado por el gobernador Juan Diego Patiño a través de la EDUR, con una inversión de $2.665 millones.
Jorge Iván Montoya, presidente de la Liga Risaraldense de Fútbol, no oculta su entusiasmo: «Mientras en Cordep tenemos una cancha con césped en mal estado, aquí estamos construyendo un escenario que cumple con normativas técnicas. Es la respuesta a una necesidad de años».
El directivo, con la experiencia de quien conoce las carencias del fútbol aficionado, asegura que esta obra representa “un medio de transformación social importantísimo. Por fin los jóvenes, profesores y todos los actores del fútbol base tendrán un espacio digno para su práctica deportiva”.
Fabio López Sánchez, líder comunitario y testigo de excepción de los trabajos, lo tiene claro: “Aquí se va a armar el verdadero banquete de fútbol”. El caleño radicado en Pereira no duda en comparar: “En Cali tenemos canchas, pero como esta… ¡quedan sobradas! Esto es envidia para los caleños”.
Sus palabras resuenan entre vecinos que ya imaginan a sus hijos y nietos corriendo detrás del balón en un escenario que promete ser «de tamaño fenomenal», según describe López.
El Gobernador Patiño Ochoa demuestra con hechos su compromiso con el deporte, pero Montoya va más allá: “No es solo con el deporte y la cultura, sino con la transformación social de nuestro departamento”.
La cancha, que ya muestra sus primeros avances con maquinaria pesada y equipos de construcción, se perfila como el futuro hogar del fútbol base risaraldense. Un espacio donde se formarán las promesas del mañana y donde la comunidad encontrará punto de encuentro.
Con información de la oficina de prensa de la Gobernación de Risaralda.

