La Gobernación de Risaralda informa a todos los risaraldenses que, en términos generales, la situación de seguridad en el departamento transcurre con normalidad, pese a algunos hechos aislados que han generado preocupación ciudadana, especialmente en los municipios de Pereira y Dosquebradas.
Casos de sicariato ligados al microtráfico
Las autoridades han identificado que los recientes casos de sicariato registrados en el área metropolitana están relacionados con disputas internas por el control del microtráfico. Si bien estos hechos resultan alarmantes y afectan la percepción de seguridad, es importante precisar —con base en los avances investigativos— que se tratan de situaciones focalizadas y no representan una amenaza extendida a la comunidad en general.
La Gobernación reitera que ningún acto de violencia es justificable, pero subraya la necesidad de diferenciar los fenómenos delincuenciales para implementar respuestas más eficaces y coordinadas en cada territorio.
Refuerzo de seguridad ante situación en el Chocó
Asimismo, se informa que debido a un grave hecho ocurrido recientemente en el departamento vecino del Chocó, donde fue secuestrado el director de Codechocó a unos 30 minutos de Quibdó, se han adoptado nuevas medidas preventivas en Risaralda.
Como parte del plan de contención y vigilancia territorial, se ha solicitado la presencia activa del Ejército Nacional en distintos municipios del departamento, especialmente en zonas limítrofes y de difícil acceso, con el fin de blindar las fronteras y proteger a la ciudadanía frente a posibles afectaciones derivadas de hechos violentos en otras regiones.
Compromiso con la seguridad y la tranquilidad ciudadana
La Gobernación, en articulación con la Policía Nacional, el Ejército, la Fiscalía y otras autoridades competentes, continuará desplegando operativos y estrategias de inteligencia para prevenir el crimen y fortalecer la seguridad pública en todos los rincones del departamento.
La comunidad puede tener la certeza de que se mantiene una vigilancia constante y una respuesta inmediata ante cualquier situación que ponga en riesgo la convivencia pacífica de los risaraldenses.