En un operativo coordinado entre la Policía Metropolitana de Pereira, el Gaula de la Policía y el Ejército Nacional, con apoyo del CTI de la Fiscalía, fueron capturados dos policías y un dragoneante del Inpec, señalados de extorsionar a un recluso de la cárcel de Pereira.
Las investigaciones revelaron que los uniformados exigían al interno cerca de 7 millones de pesos para evitar su traslado a otro centro penitenciario del país. Además, otras dos personas privadas de la libertad estarían involucradas en la red de corrupción.
El teniente coronel Óscar Ochoa, comandante encargado de la Policía Metropolitana de Pereira, aseguró que seguirán adelantando operativos de contrainteligencia para identificar y judicializar a funcionarios involucrados en actos ilícitos.
En el proceso judicial, al dragoneante del Inpec le fueron imputados los delitos de tentativa de extorsión agravada, prevaricato por omisión, peculado por apropiación y lesiones personales. Un juez determinará que deberá cumplir medida de aseguramiento en prisión, mientras avanza la investigación.
Este nuevo caso de corrupción en el sistema penitenciario ha generado preocupación sobre el manejo interno de los centros carcelarios y la influencia de redes ilegales dentro de las instituciones encargadas de la custodia de los reclusos.
