Después de décadas de mantener la discreción sobre uno de los capítulos más difíciles de su vida, el príncipe William habló por primera vez de cómo vivió el divorcio de sus padres, la princesa Diana y el entonces príncipe Carlos, hoy rey Carlos III. Sus declaraciones, emitidas durante una reciente entrevista en el marco del programa The Reluctant Traveler de Apple TV+, han conmovido al público británico y reavivado el interés por la historia familiar que marcó a toda una generación.
El heredero al trono británico compartió con franqueza los sentimientos que lo acompañaron durante aquel proceso de separación, ocurrido en 1996, cuando él tenía apenas 14 años. “Fue una etapa muy difícil. Recuerdo la confusión y el dolor que se sentía en casa. Éramos muy jóvenes y tratábamos de entender lo que estaba pasando”, expresó William, quien también aseguró que la experiencia lo ayudó a valorar el papel de la familia y el apoyo mutuo en los momentos más duros.
Cómo fue el divorcio de Diana y Carlos
El divorcio entre Diana y Carlos fue el desenlace de una relación marcada por los escándalos y la presión pública. En 1992 anunciaron su separación y, cuatro años después, en 1996, se hizo oficial el divorcio. La princesa Diana perdió su título de “Su Alteza Real”, aunque mantuvo el de Princesa de Gales, y acordó la custodia compartida de William y Harry con el entonces príncipe Carlos. La noticia impactó al Reino Unido y al mundo entero, convirtiéndose en un símbolo de la fragilidad de la familia real frente a la exposición mediática.
William recordó que la constante atención de la prensa y la tensión entre sus padres hicieron de su infancia una etapa complicada. “De niño, vi eso con mis padres… y si dejas que eso se infiltre, el daño que puede causar a tu vida familiar es algo que juré que nunca le sucedería a mi familia”, afirmó. Explicó que su propósito es mantener un entorno estable junto a su esposa, Kate Middleton, y sus tres hijos: George, Charlotte y Louis.
“Todo gira en torno al futuro y a que, si no les das a los niños un hogar feliz, saludable y estable ahora, siento que los estás preparando para una etapa difícil y una caída”, agregó el príncipe, quien subrayó que su prioridad es brindar a su familia la estabilidad que él no tuvo en su infancia.
También mencionó que es consciente de que muchas de las situaciones vividas en la niñez marcan profundamente la adultez. “Creo que todos lo intentamos y solo quiero hacer lo mejor para mis hijos, pero sé que el drama y el estrés de pequeño te afectan mucho cuando eres mayor”, reconoció William.