En su publicación en Truth Social, Trump justificó la decisión afirmando que China ha mostrado una “falta de respeto a los mercados mundiales”, lo que ha llevado a Washington a tomar medidas drásticas. Además, anunció una pausa de 90 días en los aranceles adicionales previamente previstos para más de 75 países, reduciéndolos al 10% para facilitar negociaciones comerciales con esas naciones.
Por su parte, China ha condenado la medida y ha presentado una queja formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), acusando a Estados Unidos de violar las normas comerciales internacionales. En su respuesta oficial, el Ministerio de Comercio chino advirtió que, si EE.UU. continúa intensificando las restricciones económicas, China está preparada para implementar contramedidas contundentes y “luchar hasta el final”.
Impacto en la economía global
Este nuevo episodio de tensiones comerciales podría tener consecuencias significativas para la economía global. Analistas advierten que el incremento de aranceles podría afectar los precios de productos tecnológicos, maquinaria y materias primas, aumentando la inflación y reduciendo el comercio bilateral entre las dos mayores economías del mundo.
Los mercados internacionales ya han mostrado señales de volatilidad tras el anuncio, con caídas en las bolsas asiáticas y un aumento en la demanda de activos refugio como el oro y el dólar estadounidense.
Próximos pasos y reacciones
China ha fijado la entrada en vigor de sus nuevos aranceles para las 12:01 CST del 10 de abril (19:01 CET) y ha reiterado su postura de defensa ante cualquier nueva restricción por parte de Estados Unidos. Se espera que en los próximos días ambas naciones exploren opciones diplomáticas, aunque la escalada actual sugiere que las negociaciones podrían ser difíciles.
Por su parte, el gobierno estadounidense no ha descartado más medidas económicas contra China si la situación continúa deteriorándose.