Durante los días lunes 26 y martes 27 de mayo, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) declaró nuevamente una contingencia por la indisponibilidad del servicio informático vinculado al formulario 110, herramienta utilizada por las personas jurídicas para cumplir con su obligación de presentar la declaración del impuesto de renta.
La medida responde a las constantes dificultades que los usuarios han reportado en la plataforma, situación que se repite con frecuencia durante los picos de vencimientos tributarios. En esta ocasión, la interrupción afectó la presentación oportuna de los formularios y el pago del impuesto mediante el formulario 490, lo que generó preocupación en contadores públicos y contribuyentes.
¿Qué solución ofrece la DIAN a los afectados?
Ante este escenario, la DIAN anunció una extensión del plazo para cumplir con las obligaciones tributarias sin incurrir en sanciones. Según el comunicado oficial, los contribuyentes “cuyo vencimiento para los formularios 110 y 490 era el 26 de mayo de 2025, podrán presentarlos hasta las 23:59 horas del 28 de mayo de 2025”.
Esta decisión se ampara en las disposiciones del Estatuto Tributario, permitiendo a los afectados realizar su presentación y pago sin que se les apliquen intereses moratorios ni sanción por extemporaneidad. Sin embargo, la medida es exclusiva para aquellos cuyo vencimiento se dio el lunes 26 de mayo, lo cual deja por fuera a quienes tenían fechas posteriores y también se han visto perjudicados por las fallas del sistema.
La aclaración es clave, pues en ocasiones anteriores algunos contribuyentes han asumido erróneamente que la contingencia aplica de forma generalizada, lo cual puede acarrear consecuencias económicas si no se verifican los términos específicos del anuncio.
Reiteradas fallas en la plataforma aumentan la presión sobre la DIAN
Más allá de la medida de contingencia, el anuncio ha reactivado críticas sobre el desempeño técnico de la plataforma de la DIAN. Contadores públicos consultados por medios como Caracol Radio han denunciado que los problemas en el sistema son recurrentes, especialmente durante los períodos de alta demanda como los ciclos de declaración de renta y pago de impuestos.
Entre los fallos reportados se encuentran la lentitud del sistema, caídas constantes del portal, errores al momento de cargar documentos y dificultades para generar recibos oficiales de pago. Estas situaciones afectan directamente el cumplimiento oportuno de las obligaciones tributarias y ponen en entredicho la eficiencia tecnológica de una de las instituciones más relevantes del país en materia fiscal.
Si bien la DIAN ha implementado medidas para robustecer su infraestructura digital, los incidentes reiterados apuntan a una necesidad urgente de modernización estructural, especialmente en épocas críticas donde miles de contribuyentes dependen del correcto funcionamiento del sistema.
