Con la llegada de la temporada decembrina, el uso de pólvora vuelve a encender una discusión recurrente en el país: su impacto sobre los animales, las personas vulnerables y el ambiente. En este contexto, el Congreso dio un primer paso en la regulación de estas prácticas con la aprobación, en primer debate, del proyecto de ley Cielos en Calma.

Una respuesta al impacto del ruido en animales y comunidades

Veterinarios y expertos han advertido que las detonaciones provocan estrés extremo, desorientación, huida impulsiva e incluso la muerte de animales que no logran soportar los altos niveles de ruido. Esta situación también afecta a personas vulnerables, como adultos mayores y niños con condiciones sensoriales, especialmente durante las celebraciones de fin de año.

¿Qué propone el proyecto de ley?

La iniciativa, liderada por la senadora del Partido Verde Andrea Padilla, busca transformar la manera en que se utiliza la pirotecnia en Colombia. Entre sus principales medidas está la prohibición de la destinación de recursos públicos para la compra de pólvora, la eliminación de las alboradas mediante perímetros estrictos de seguridad y la reducción al mínimo de los decibeles permitidos.

Además, el proyecto establece fechas, horarios y una duración específica para los espectáculos pirotécnicos, con el objetivo de disminuir riesgos y afectaciones a la vida humana, la fauna y los ecosistemas.

Un proyecto que insiste pese a los obstáculos

Padilla recordó que esta iniciativa ya había alcanzado el tercer debate en una legislatura anterior, pero fue archivada debido a intereses electorales. Pese a ello, afirmó que persistirá en sacarla adelante, subrayando que el propósito es priorizar la vida por encima de prácticas que generan sufrimiento.

“No se trata de cuidar el negocio de un par de personas, sino de cuidar la vida en todas sus expresiones”, señaló la senadora, en declaraciones realizadas en el marco del Día Mundial de los Derechos de los Animales.

Un debate abierto en plena temporada crítica

Aunque el proyecto no busca eliminar las celebraciones ni prohibir de forma absoluta la pirotecnia, sí propone una regulación más estricta y la adaptación del sector a prácticas menos nocivas. La discusión se da en medio de una temporada especialmente compleja para la fauna, en la que ya se han reportado afectaciones y muertes de animales asociadas al estruendo.

Con tres debates aún pendientes, Cielos en Calma abre una discusión de fondo sobre cómo equilibrar tradición, economía y la protección de la vida en todas sus formas.

Entérate con El Expreso