Luego de ser rescatado por ser víctima del tráfico ilegal de fauna, el bioparque Ukumarí cuyo objetivo es la conservación y protección de las especies, anuncia la llegada de un nuevo integrante a su familia llamado Chaac, un imponente jaguar que se convierte en uno de los principales embajadores de la conservación de la fauna colombiana y un símbolo de la biodiversidad en el país.
Este jaguar tiene 7 años, que como ya se mencionó, proviene del tráfico ilegal de fauna y, tras su rescate por parte de la Corporación Corponor de Cucutá fue trasladado en un Hércules con las Fuerzas Militares de Colombia al Bioparque; ahora se encuentra en un lugar seguro donde puede recibir la atención que necesita y contribuir a la educación ambiental de la región.
Al respecto, Raúl Murillo Betancur, gerente del Bioparque Ukumarí, expresó la importancia de esta nueva llegada.
«Conservar especies es muy importante para nosotros, y en este caso, tener un jaguar como Chaac es significativo por dos razones, primero, porque nos brinda la oportunidad de educar sobre la relevancia de esta especie en los ecosistemas colombianos; y segundo, porque podemos sensibilizar sobre los peligros del tráfico ilegal de fauna y la cacería furtiva, que afectan gravemente la biodiversidad de nuestro país. En Ukumarí, nos consideramos la segunda oportunidad para aquellos animales que no pueden vivir en libertad», afirmó Murillo.
Chaac es un ejemplar que además de ser un símbolo de la fauna colombiana, es considerado el «guardián del bosque» o el «guardián nocturno».
Esteban Marín, biólogo coordinador de población de Ukumarí, indicó que «Chaac es nuestro nuevo integrante y representa una especie emblema de Colombia. Su historia, marcada por el tráfico ilegal de fauna, nos permite transmitir un mensaje claro sobre la importancia de proteger y preservar estas especies».
Javier Guerrero, médico veterinario de Ukumarí, explicó que el jaguar fue encontrado en una finca cerca de la frontera con Venezuela. “Una vez rescatado, se le realizó una evaluación médica general, incluyendo un examen de la cavidad bucal y su estado físico general. Afortunadamente, no se evidenciaron problemas graves, pero sí una deficiencia nutricional que estamos tratando de manera especializada aquí en el Bioparque».
El Bioparque Ukumarí continúa trabajando incansablemente para garantizar el bienestar de los animales que alberga. Cada nuevo integrante, como Chaac, es una oportunidad para seguir promoviendo la conservación, la educación y la sensibilización sobre la fauna silvestre y las amenazas que enfrentan.
Con información de la oficina de prensa de la Alcaldía de Pereira