El Gobierno de Irán ha confirmado este lunes la muerte del presidente Ebrahim Raisí y del ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, en un trágico accidente de helicóptero en una zona montañosa entre Irán y Azerbaiyán. Según el comunicado oficial, el helicóptero se estrelló debido a condiciones meteorológicas adversas.
En el mismo accidente también fallecieron el gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malik Rahmati; el ayatolá Mohamad Alí Ale Hashem, encargado de los rezos del viernes en Tabriz; y otros miembros del equipo de seguridad, los pilotos y la tripulación.
El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, ha declarado cinco días de luto nacional. Además, ha anunciado la celebración de una ceremonia fúnebre en Tabriz para el martes y rezos en Teherán y otras ciudades del país. Jameneí ha elogiado a Raisí, describiéndolo como «un servidor sincero y valioso» y señalando su incansable dedicación.
En cumplimiento del artículo 131 de la Constitución iraní, Jameneí ha nombrado a Mohamad Mojber, el vicepresidente primero, como presidente interino. Mojber, de 68 años, asumirá la responsabilidad de liderar el poder ejecutivo y coordinar la elección de un nuevo presidente en un plazo de 50 días.
Los equipos de rescate, que enfrentaron difíciles condiciones meteorológicas y un terreno abrupto, han recuperado los restos mortales de los ocupantes del helicóptero. Sin embargo, algunos cuerpos quedaron carbonizados y no han podido ser identificados.
El helicóptero en el que viajaba Raisí desapareció el domingo cuando regresaba de Tabriz. Otros dos helicópteros de la comitiva llegaron a su destino sin problemas. Raisí había inaugurado una presa junto al presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíev, un proyecto simbólico de la cooperación bilateral.
Raisí, un ultraconservador que llegó al poder en 2021 tras una elección con la participación más baja en la historia de la República Islámica, era considerado uno de los favoritos para suceder a Jameneí como líder supremo.