El Ministerio del Interior de Colombia ha lanzado una propuesta para un Acuerdo Nacional que busca mejorar el debate político y alcanzar consensos que ayuden a solucionar los principales problemas que afectan la vida de los colombianos. Esta iniciativa se basa en los principios de la Constitución Política de 1991 y promueve un ambiente de respeto y seguridad en la deliberación política.
Según el ministro Juan Fernando Cristo, el acuerdo tiene como objetivo ser un proceso incluyente y participativo, centrado en la construcción de consensos y acuerdos entre los diversos actores políticos, sociales, económicos y ciudadanos del país. Este acuerdo propone cinco puntos esenciales para guiar la discusión y las acciones necesarias hacia un país más unido y pacífico.
1. Seguridad y erradicación de la violencia en la política
Uno de los puntos más urgentes del Acuerdo Nacional es eliminar la violencia en el ejercicio de la política. Para ello, se propone la erradicación del lenguaje violento y estigmatizante en el debate público, así como la protección de líderes políticos y sociales que han sido objeto de amenazas y atentados.
El Gobierno se compromete a reforzar la seguridad de los firmantes de paz y líderes que se encuentran en zonas vulnerables, y busca además un pacto político que impulse la reconciliación nacional y la convivencia pacífica. El rechazo a la violencia política es fundamental, así como la exclusión de candidatos con vínculos a grupos ilegales. La obligación del Estado en este punto es clara: seguir avanzando en la recuperación territorial y el desmantelamiento de grupos armados y organizaciones criminales que actúan al margen de la ley.
El proceso de paz y reconciliación, según el acuerdo, será posible siempre que los actores armados demuestren una verdadera voluntad de paz y se comprometan a abandonar las armas y el uso de la violencia como forma de obtener poder o influencia.
2. Respeto a las reglas y calendario electoral
El segundo punto clave del Acuerdo Nacional se refiere al respeto de las normas electorales. En este apartado, el Ministerio del Interior ha dejado claro que se mantendrán estables las reglas de juego en todos los niveles del gobierno —nacional, regional y local— sin modificaciones a corto, mediano o largo plazo. Se resalta que no habrá reelección ni cambios en los períodos de los mandatarios de la rama ejecutiva, elegidos popularmente.
Este compromiso también incluye un estudio del sistema político y electoral con el fin de construir consensos que fortalezcan la transparencia y la eficiencia. Además, se trabajará para consolidar los partidos y movimientos políticos, mejorando su financiación y asegurando un campo de juego equitativo.
Todas las reformas que se propongan en este sentido seguirán el debido proceso según lo estipulado por la Constitución de 1991, con la participación activa de los ciudadanos y el Congreso, garantizando el control constitucional en cada una de las decisiones.
3. Transformación territorial en municipios afectados por el conflicto
Un punto central del acuerdo es la necesidad de transformar los territorios más afectados por el conflicto armado. En total, se busca mejorar las condiciones de vida de más de 6.6 millones de colombianos que habitan en 170 municipios, muchos de ellos incluidos en los Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).
El gobierno plantea trabajar en coordinación con las comunidades, el sector privado y la comunidad internacional para lograr una mejora sostenible en las condiciones de vida de estas regiones. Se impulsarán medidas para fortalecer los gobiernos locales y lograr una transformación integral, que permita a estas comunidades superar los impactos de décadas de violencia.
4. Crecimiento económico con equidad
El cuarto punto del Acuerdo Nacional se centra en la transformación de la economía hacia un modelo más equitativo e inclusivo. Se busca romper con las dinámicas actuales de desigualdad y desempleo, promoviendo una economía más productiva que respete el medio ambiente y potencie sectores estratégicos como la educación, la tecnología y la conectividad.
El plan incluye impulsar una reforma agraria que fomente el desarrollo rural integral, el fortalecimiento de la agroindustria y la protección de los recursos naturales. Se buscará también mejorar la competitividad mediante la innovación y políticas de crédito que favorezcan los sectores más estratégicos de la economía.
5. Deliberación argumentada y trámite de reformas sociales en el Congreso
El último punto del acuerdo propone un compromiso con la deliberación argumentada en el Congreso, donde se discutirá una agenda legislativa centrada en proyectos prioritarios para el bienestar de la sociedad. El acuerdo subraya la importancia del respeto a la oposición y la búsqueda de consensos a través de un diálogo respetuoso y constructivo.
El Gobierno espera que los ciudadanos participen activamente en la construcción de estos consensos, con el fin de avanzar hacia una sociedad más equitativa, con una economía más robusta y una democracia ampliada.
La propuesta de Acuerdo Nacional del Ministerio del Interior representa un paso importante hacia la reconciliación y el fortalecimiento de la democracia en Colombia. El reto ahora es lograr que las diferentes fuerzas políticas, sociales y económicas del país se comprometan a estos principios para avanzar en la construcción de un país más justo y en paz.