Una ciudad con una afición de primera categoría y dirigentes de cuarta. Cada día llevan al equipo al abismo, desmantelada la plantilla de jugadores y es que nadie trabaja sin salario, la institucionalidad del equipo por los suelos, los jugadores juveniles quemados antes de entrar a competir, compradores inventados, la ficha deportiva en riesgo, las deudas sin pagar ¿Señor Álvaro López hasta donde piensa llevar lo que queda de este equipo? Excelente la decisión del alcalde Mauricio Salazar, mientras esté Álvaro López administrando de esta manera el equipo ni un solo peso, ojalá el gobernador Juan Diego Patiño haga igual.
¿Con este descalabro en el equipo compraría usted boletas para ir al estadio en 2026?
