El acceso a las tecnologías de la información y el internet son indispensable en el siglo XXI para el ejercicio de la democracia en un sentido amplio al de ser elegido y poder elegir. El internet como servicio esencial para desarrollar la vida en común-unidad, permite el acercamiento, interacción y promulgación de información por medio de la cual se toman decisiones no solo para votar, sino para saber por qué se está eligiendo.
Se estima que el acceso a los dispositivos tecnológico para llegar a la información implica el uso masivo de las redes sociales en primera instancia y segunda instancia el acceso a medios de comunicación digitales que permiten enterarse de las situaciones mundiales, nacionales y locales; sin embargo, es fundamental reconocer que las redes sociales poseen estrategias para saber, identificar y promover la información con la cual el usuario interactúa de manera constante, lo que implica la masificación del uso del dispositivo, lo anterior debido a una estrategia tecnológica llamada algoritmo que desarrolla una experiencia hiperpersonalizada que pone sesgos de opinión política, sin la posibilidad de generar crítica.
Entonces se hace indispensable que los algoritmos identifiquen un porcentaje imperante de interacciones por medio de likes, comentarios o menciones con los medios de comunicación verificados, activistas políticos, las propias redes oficiales de los políticos y las instituciones públicas como las de la Corte Constitucional que permita enterarse de manera crítica sobre los acontecimientos, avances, propuestas y decisiones políticas que afectan el diario vivir en el trabajo, la familia, las relaciones, los negocios, la internacionalización del país, entre otras.
El acceso crítico a la información es indispensable para saber elegir, proponer y promover los derechos y deberes como ciudadanos de Colombia y el mundo buscando de manera intrínseca el bien común. La política hace parte de la vida ciudadana, lo cual implica que se debe ejecutar las acciones de elección popular por medio de sistemas de representación como la democracia, otorgándole el poder de las decisiones a personas que puedan masificar el beneficio común o individual a través de las propuestas de intereses e ideas de país y esto se promueve en mayor medida por medio de las estrategias de comunicación de los políticos y las instancias públicas que ejercen control y visión de la nación.
Se estima según el Ministerio de las Tecnologías nacional que 69% de las personas con internet lo usan diariamente por medio de teléfonos inteligentes en un promedio de 10 horas diarias para trabajo, estudio u informarse. Así mismo el 96.3% de los hogares colombianos poseen al menos un celular que puede tener acceso a internet y en la zona rural es del 89.8%, es decir, 9 de cada 10 hogares rurales tienen acceso a un celular como dispositivo tecnológico, sin embargo se debe explicitar que en la zona rural el acceso al internet según el DANE para el año 2021 era del 28.8% teniendo un aumento al reportarse que el 41.4% de los hogares de la zona rural dispersa cuenta actualmente con internet, promedio bajo aún, con tendencia al alza en el acceso al servicio.
Lo anterior implica el desarrollo de estrategias de educación, sensibilización y análisis crítico de la información por medio de dispositivos tecnológicos en mayor medida haciendo uso de las redes sociales y canales de comunicación oficial de los actores políticos: activistas, candidatos, instituciones públicas y servidores públicos con cargos de elección popular deben ejercer campañas masivas digitales sobre educación digital segura, lo que implica acceso libre a cómo se informan, participan y deciden los colombianos el futuro del país de la libertad y el orden.