Una inspección forense al teléfono celular del sicario implicado en el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay ha destapado una preocupante conexión. Según las últimas revelaciones, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las FARC estarían presuntamente involucradas en el intento de asesinato, añadiendo una capa de complejidad y gravedad a la investigación.

El dispositivo móvil del agresor, que sorprendentemente no contenía aplicaciones comunes como WhatsApp o de banca, resultó ser una pieza clave para los investigadores. En su memoria, se hallaron contactos y fotografías que, según las autoridades, corresponden a individuos asociados directamente con las estructuras del ELN y las disidencias de las FARC. Este hallazgo sugiere una planificación y autoría intelectual detrás del ataque.

La Fiscalía General de la Nación ha tomado estas nuevas evidencias con la seriedad que el caso amerita y ha anunciado que la investigación continúa a fondo. El objetivo primordial de la entidad es identificar y llevar ante la justicia a los autores intelectuales del atentado. Las pruebas del celular son un paso fundamental para desentrañar la cadena de mando y los verdaderos motivos del intento de homicidio.

La presunta participación de grupos armados ilegales de la talla del ELN y las disidencias de las FARC en un ataque contra una figura política de alto perfil como Miguel Uribe Turbay es un hecho de extrema gravedad. Este tipo de incidentes no solo atenta contra la vida de un individuo, sino que también socava la democracia y genera un clima de intimidación en el contexto electoral del país.

El atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, ocurrido días atrás, conmocionó a la opinión pública y encendió las alarmas sobre la seguridad de los actores políticos en Colombia. A partir de ese momento, las autoridades iniciaron una exhaustiva investigación que hoy, con la información del celular del sicario, parece tomar un rumbo más definido hacia las estructuras armadas.

La confirmación de la posible implicación de estos grupos armados en el ataque a Uribe Turbay no solo impacta en el ámbito judicial, sino que también genera serias repercusiones en el panorama de seguridad nacional y en los procesos de paz que el gobierno pueda estar adelantando. Este descubrimiento recalca la persistente amenaza que representan estas organizaciones para la estabilidad y la democracia colombiana.

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