El miércoles, una conversación telefónica entre los presidentes de Colombia y Venezuela, Gustavo Petro y Nicolás Maduro, respectivamente, se convirtió en un foco de atención internacional.
En una conferencia de prensa desde el Palacio de Miraflores en Caracas, Maduro reveló detalles de su conversación con Petro. El mandatario venezolano no escatimó en elogios hacia su homólogo colombiano, describiéndolo como «uno de los hombres más inteligentes que he conocido en mi vida». Según Maduro, la conversación sirvió para explicar a Petro varios aspectos sobre la situación en Venezuela.
Este acercamiento ocurre después de que el embajador colombiano ante la OEA se abstuviera de votar en una resolución que solicitaba a Nicolás Maduro entregar todas las actas de las elecciones. Este gesto fue interpretado por algunos analistas como una muestra de neutralidad de Colombia ante el cuestionado proceso electoral venezolano, que ha sido criticado por la oposición debido a irregularidades reportadas el 28 de julio.
Maduro destacó la cooperación de Petro y otros países en pro de la paz en Venezuela. «Agradecemos toda la cooperación de aquellos que tienen la posibilidad de contribuir a la paz de Venezuela», afirmó, subrayando el respeto que siente hacia Petro y valorando sus consejos e ideas.
El presidente venezolano también hizo un llamado a la no injerencia en los asuntos internos de Colombia, enfatizando su apoyo a las negociaciones de paz con grupos armados, que según él, se realizan «solo de buena fe». Maduro aseguró que la paz en Venezuela es fundamental para el proceso de paz en Colombia.
Por su parte, Petro recibió la llamada mientras participaba en el lanzamiento del Instituto Colombiano del Petróleo y Energías de la Transición (ICPET) en Piedecuesta, Santander. La conversación, facilitada por la funcionaria Laura Sarabia, no duró más de 10 minutos y se enmarca en un momento de alta sensibilidad política tanto en Venezuela como en Colombia.