La Unión de Cafeteros de Colombia ha anunciado un paro nacional para el próximo 28 de abril, en respuesta a lo que consideran una falta de apoyo por parte del Gobierno. Aunque alrededor de unos 900 caficultores del Cauca y el Caquetá han recibido ayudas del programa de incentivos económicos del Gobierno del Cambio, otras regiones del país están descontentas con la situación.
Durante una jornada de protestas frente a las instalaciones de la FNC en Bogotá, los caficultores expresaron sus inconformidades y exigieron cambios en los precios del café, aranceles a las importaciones, y una reestructuración de la FNC. A pesar del diálogo con el gerente de la FNC, Germán Bahamón, no se llegó a un acuerdo, lo que llevó al anuncio del paro.
La Unión de Cafeteros planea realizar un plebiscito cafetero para reestructurar la Federación Nacional de Cafeteros, buscando una mayor representatividad y transparencia en la gestión del gremio. Los líderes cafeteros de diferentes regiones del país se preparan para participar en las movilizaciones, argumentando la falta de apoyo del gobierno nacional y la necesidad de subsidios para los caficultores afectados por años de crisis en el sector.
Este movimiento, que no se identifica con la Dignidad Cafetera ni simpatiza con la FNC, cuenta con el respaldo de caficultores de 11 departamentos, especialmente del Eje Cafetero. A lo largo del último año, han realizado diversas protestas contra la FNC, incluyendo paros y manifestaciones en ciudades como Armenia, Pereira y Bogotá. Ahora, advierten que entrarán en paro nacional para hacer oír sus demandas y buscar soluciones a los problemas que enfrenta el sector cafetero colombiano.