¡¡Qué avispados !!! Cotizaron alimentos en grandes almacenes pero entregaron a las familias productos deficientes y de mala calidad. La Contraloría General de la República halló sobrecostos exagerados, por ejemplo, en la harina de maíz comprada a $2.520 cuando el precio era de $1.370, avena en hojuelas a $3.480 cuando la Contraloría la cotizó a $1.910 y no era de calidad, usaron margarina cuando la ficha técnica decía mantequilla y encima cobraron $384 millones cuando solo valía $97 millones, también hubo sobreprecios en la leche y complementos de panadería.
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¡Qué corrompidos con estos alimentos para bebés, niños y niñas desnutridas y madres gestantes!
Un contrato de $15.295 millones con precios exagerados y mala calidad de alimentos.
Didier Lobo Chinchilla, vicepresidente del Congreso, firmó siendo alcalde de La Jagua de Ibirico el Contrato 340 del año 2012 con la Unión Temporal de Servicios Nutricionales Complementarios, y ahí estaba Mauricio Castillo Ramírez con Fundalimentos, la Contraloría imputó a todos ellos por responsabilidad fiscal y la Procuraduría en el año 2023 sancionó a Chinchilla.
